Se estima que el uso del cannabis se inició hace 4 mil años, aproximadamente. Se distinguen tres grupos de cannabis, la Cannabis sativa, la Cannabis indica y Cannabis ruderalis originarias. A estas se le atribuyen diversos efectos terapéuticos, brindados por sus componentes y que alrededor del mundo son utilizados para diversos fines. El cannabis contiene al menos 60 cannabinoides, siendo el principal el A9–tetrahidrocanabinol (THC).
La forma habitual de consumo de la marihuana es el cigarrillo; donde se utilizan directamente las hojas y cogollos, secos y desmenuzados que pueden ir mezclados o no con tabaco. Otras formas de uso incluyen las pipas comunes o de pipas de agua (cachimbas). El cannabis también se utiliza para la preparación de platillos, como pastelillos («mot cake», ‘»funny cake») y panecillos con hachís («hash brownies»); o bien como ingrediente en mantequilla y dulces.
En las culturas india, persa, romana y otras se utilizó el cannabis para el alivio de diversos malestares, como gota, reumatismo, síndrome premenstrual y el dolor, e infecciones, como la malaria. Actualmente cada vez más países han comenzado a utilizar extractos de cannabis y / o cannabis con fines médicos, científicos o recreativos.
En Nepal, por ejemplo, las flores y las hojas se utilizan para fumar. En la India se realizan diferentes bebidas como el bhang, al que se añade pimienta, aromáticas y azúcar, el poust se prepara con agua, el louki con alcohol y la mourra con tintura de opio. En Irán se prefiere la marihuana en pasteles, preparadas con mantequilla y esencia de rosas.
En Medio Oriente se ingiere una bebida denominada madjoun (mezcla de hachís, opio, nuez vómica y datura); el dawamesk, mermelada semejante al rahat loukoum, hecha de hachís, almizcle, canela, pistache y azúcar.
En Egipto se conoce el chastri, una bebida hecha a base de hachís, azúcar y raqui; sin embargo, en el resto de África se fuma, sobre todo el cannabis. En Argelia, el cannabis denominado “cáñamo del Atlas” se mezcla con tabaco soufi cultivado en el Sur.
El uso del cannabis se diferencia de país en país, pues es empleado en panadería, para fumar, para preparar bebidas, entre otras. Esto refleja la flexibilidad que posee el cannabis para ser utilizado.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
Villanueva, Cleva. (2010). Los pros y los contras del uso de la mariguana. Cuicuilco, 17(49), 13-30.
Leal Galicia, P., Betancourt Ocampo, D., González González, A., & Romo Parra, H. (2018). Breve historia sobre la marihuana en Occidente. Revista de Neurología, 67(04), 133.
Molina H, M. M. (2008). El cannabis en la historia: pasado y presente. Cultura y droga, 13(15), 95–110.
Rodríguez Carranza, Rodolfo. (2012). Los productos de Cannabis sativa: situación actual y perspectivas en medicina. Salud mental, 35(3), 247-256.
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