A pesar de que la semilla de cáñamo (HEMP) ha existido desde hace mucho tiempo, es en los últimos años que se ha incrementado el interés en sus propiedades nutricionales y terapéuticas.
Las semillas de cáñamo son frutos de la C. sativa. Esta semilla contiene aproximadamente 25% – 30% de grasas, 25% – 30% de proteínas, 30% – 40% de fibra; sin embargo, esto puede variar dependiendo de el tipo de cultivo ya que existen más de 40 especies de cultivos de cáñamo.
Estas semillas son una buena fuente de omega 3 y 6. Su valor proteico es gracias a su contenido de globulina, albúmina, arginina y ácido glutámico, los cuales ayudan a la regulación funcional de los órganos y al metabolismo humano. Su contenido de carbohidratos se encuentra principalmente en la capa externa de las semillas. Además de estas propiedades, también posee antioxidantes naturales y otros componentes bioactivos como péptidos, compuestos fenólicos, tocoferoles, carotenoides y fitoesteroles.
En cuanto a su composición mineral, puede variar de acuerdo con la condición ambiental, composición del suelo mineral, el uso o no de fertilizantes, así como el tipo de fertilizante y la variedad de la planta. Los principales minerales que se encuentran en la semilla son fósforo, potasio, magnesio, calcio, sodio, hierro, manganeso, zinc y cobre.
Por otro lado, también contienen compuestos que pueden reducir la disponibilidad de nutrientes, o bien, su metabolismo pueden llevar a la liberación de productos tóxicos que afectan el rendimiento gástrico, intestinal y metabólico. Entre estos compuestos podemos encontrar el ácido fítico, inhibidores de tripsina, taninos, glucósidos cianogénicos y saponinas; por lo cual, al igual que cualquier semilla, esta debe de pasar por un proceso de “activación” o remojo para reducir los antinutrientes.
En cuestiones terapéuticas, la semilla de cáñamo se ha propuesto como agente protector contra las enfermedades cardiovasculares, síndrome metabólico y trastornos neurológicos.
La semilla de cáñamo se ha consumido desde hace mucho tiempo atrás, sin embargo, en los últimos años se ha empezado a mostrar un gran interés en ella y en su valor nutricional. Al estudiarla se encontrado que posee un gran valor nutrimental que resulta benéfico para salud, así como para la prevención de algunas enfermedades. Se pueden encontrar productos hechos a base de esta semilla como harina, aceite e incluso, la propia semilla.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
- Crescente, G. Piccolella, S. Esposito, A. Scognamiglio, M. Fiorentino, A. & Pacifico, S. (2018). Chemical composition and nutraceutical properties of hempseed: an ancient food with actual functional value. Phytochemistry Reviews, 17(4), 733-749.
- Leonard, W. Zhang, P. Ying, D. & Fang, Z. (2019). Hempseed in food industry: Nutritional value, health benefits, and industrial applications. Comprehensive Reviews In Food Science And Food Safety, 19(1), 282-308.
- Farinon, B. Molinari, R. Costantini, L. & Merendino, N. (2020). The Seed of Industrial Hemp (Cannabis sativa L.): Nutritional Quality and Potential Functionality for Human Health and Nutrition. Nutrients, 12(7), 1935.
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