El Cannabis sativa es una planta que se puede aprovechar casi en su totalidad, pues además de sus propiedades ya conocidas proporciona fibras textiles que pueden ser utilizadas para la fabricación de tela. C. sativa es originaria de Asia y su uso para producir fibras y confeccionar productos textiles, tiene origen desde del 4000 a.C. En México, el uso de C. sativa se origina durante la época de la Colonia, en la cual se estableció su cultivo con la finalidad de obtener fibras textiles.
Sin embargo, el recorrido del cáñamo en la industria textil es el más desconocido, pero uno de los más interesantes por lo que puede suponer para el futuro de la moda.
Aunque la mayoría de las aplicaciones del cannabis se relacionan con la flor o las hojas, de donde son extraídos los ingredientes usados para los productos cosméticos y farmacéuticos, en el cáñamo lo que se utiliza principalmente es el tallo, pues cuando se corta es posible encontrar fibras.
Después de la extracción de las fibras más largas y finas, ideales para hacer las telas, se retira un componente llamado lignina y se hace el hilado para que a continuación pase al proceso de tejeduría. Dando como resultado prendas cómodas, y que pueden ser utilizadas por un largo periodo de tiempo debido a que su resistencia es similar a la del nylon.
Uno de los usos más conocido del cáñamo industrial es en la industria naviera donde se utiliza en la fabricación de cuerdas, velas y redes de pesca debido a su fuerza y resistencia que poseen sus fibras.
Una de las características de las fibras obtenidas del cannabis es que absorben fácilmente los tintes durante su producción textil lo que genera que no se decolore rápidamente. Además, tiene el potencial de que se biodegrada en cerca de un año en comparación con el poliéster que puede tardar más de 200 años.
Una de las marcas de jeans más conocida a nivel mundial (Levi’s) en 1873 patentó el primer pantalón vaquero fabricado con cáñamo, un modelo creado para los mineros de California. Asimismo, la marca cuenta con una línea de vaqueros hechos de un tejido denominado ‘cottonized hemp’ o “cáñamo algodonizado”, que se encuentra compuesto por un 30% de cáñamo y un 70% de algodón, consiguiendo así una suavidad extra.
Aunque la ropa hecha con cáñamo de cannabis no psicoactivo ha sido utilizada desde hace muchos años y se considera una tradición en Asia, esta planta al ser declarada ilegal su producción masiva se vio afectada. Sin embargo, cuando inició la despenalización en varios países el Hemp (cáñamo) se consideró como una alternativa para la industria de la moda sostenible.
Si se compara con el algodón, el cáñamo tiene la propiedad de consumir menos agua durante su proceso de fabricación y una vez que el producto textil ha sido terminado cuenta con una mayor resistencia térmica, mejor absorción y dispersión de la humedad.
El uso del cannabis o cáñamo en la industria textil podría significar una buena opción para la fabricación de telas, cuerdas, ropa, etc. debido a que cuenta con múltiples ventajas tanto para su utilización como para el medio ambiente.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
Ángeles López, Guadalupe Esther, Brindis, Fernando, Cristians Niizawa, Sol, & Ventura Martínez, Rosa. (2014). Cannabis sativa L., una planta singular. Revista mexicana de ciencias farmacéuticas, 45(4), 1-6.
Salgado, G. (2020, 6 diciembre). El cáñamo teje un futuro textil sostenible. Diario Sur.
Cámara de Comercio de Bogotá. (2020). La marca que comercializará ropa con cáñamo de cannabis en Colombia.
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